En cuanto a la construcción de la marca, se usa la “LL” , de Llesca, cruzándola con una línea y dotándola de una nueva simbología próxima a la espiga de trigo. Mezclamos aquí la Inicial del nombre con el producto base. La tipografía empleada es una extrabold, que le imprimen una gran fuerza y presencia, pero con remates suaves y dulces que humanizan el logotipo. Junto a ella, cierra un claim de marca más suave y delicado para definir la actividad.